Especies del mes
Noviembre
Nos encontramos en noviembre, atrás quedan los largos días estivales de calor y nos adentramos en un mes que ha comenzado aportando temperaturas suaves, e incluso algo elevadas, pero del que podemos asegurar que pronto dejará ver esas "heladas negras" que Miguel Delibes relataba con soberbio acierto en su obra. Es época de maduración de muchos frutos, entre ellos las piñas, que preparan sus semillas o piñones para una nueva vida. Los piñones más preciados son los de la especie de pino piñonero o Pinus pinea, de formidable tamaño y sabor. También es época de celo entre algunos animales como el jabalí (Sus scrofa), la otra especie de la que hablamos este mes, que aprovechará la llegada del frío para comenzar su época de reproducción.

Jabalí

El jabalí (Sus scrofa), el dueño de la noche, para muchos un fantasma, para otros un problema. Ocupa toda la superficie de nuestra provincia, habitando ecosistemas tan dispares, como las altas cumbres de la Sierra de Ayllón por encima de 1800m de altitud, o los valles cálidos de la Alcarria Baja.
Sus hábitos principalmente nocturnos hacen que no sea frecuente verlos. Mucha gente teme un encuentro con estos animales, ya que tienen la fama de ser agresivos, pero generalmente temen al hombre y huyen despavoridos.
Aunque los jabalíes ocasionalmente pueden reproducirse en otras épocas, en noviembre comienza el celo. Los grandes machos solitarios luchan entre ellos violentamente con sus grandes navajas, para conseguir ser el macho dominante de la piara con la que se juntan en estos meses.
El jabalí en un animal casi sin depredadores naturales, solo el lobo es capaz de controlar sus poblaciones, pero este es escaso en la provincia, por lo que los jabalíes en las zonas que tienen suficientes recursos, aumentan considerablemente su número. Con estas altas densidades, comienzan los problemas con los humanos: accidentes de tráfico y destrozos en cultivos y huertos. La solución tradicional, es la caza. Miles de jabalíes se matan al año en distintas modalidades. Estas actividades generan grandes cantidades de beneficios para las distintas comarcas, pero no son tantas para los ecosistemas. La caza se centra en bajar las densidades, pero especialmente se cazan los grandes machos de grandes colmillos y amoladeras, eliminando así los ejemplares más sanos mejor adaptados. La caza nunca será tan efectiva como la predación que realizan los lobos, eligen los ejemplares debilitados, enfermos o despistados, mejorando la genética de la especie en el continuo cambio que es la evolución.
En todos los ecosistemas incompletos, nuestra gestión debería ser en espera de conseguir un equilibrio natural, para dejar de entorpecer el desarrollo y poder vivir conservando tradiciones y la vida que nos rodea.
Fotos de Jabalí

Pino piñonero

El pino piñonero (Pinus pinea) se encuentra en el grupo de especies perennes que en estas épocas, al mantener su hojas o acículas siempre verdes, contrastan con el resto del paisaje regalándonos un poco de color entre los marrones, rojos o amarillos típicos del otoño. Este grupo es el de las gimnospermas, que entre otras características, producen sus semillas al descubierto dentro de la piña o estróbilo.
Pinus pinea es una especie muy mediterránea, que lidia muy bien con nuestras condiciones de dura sequía estival y altas tempraturas. Además siente predilección por los sustratos arenosos y pobres en los que otras especies no son capaces de vivir, ayudando con ello a evitar la pérdida de suelo en zonas muy vulnerables a la erosión. Tanto es así que en Doñana se ha utilizado para la retención de dunas móviles.
Sin embargo la virtud de este pino de porte aparasolado que más valor ha adquirido para el hombre es su piñon. Es sin duda el que tiene mayor tamaño y con él se elaboran infinidad de productos de repostería y es ingrediente indispensable en muchas de nuestras recetas. Tanto es así que una amplia extensión de nuestro territorio está dedicada a esta especie solo por dicha virtud.
La maduración de sus piñas tiene lugar en estas fechas, después de haber acabado un periodo de desarrollo de casi tres años, superando tres veranos completos.
Fotos de Pino piñonero
